Hace más de sesenta ańos, Adrian Troadec vio a una chica salir de una clase de música. Dos guerras mundiales después, aún funciona la fábrica de chocolate que abrió para conquistarla.More than 60 years ago, Adrian Troadec saw a girl come out of a music class. Two world wars later, he still works in the chocolate factory that he opened to conquer her.